La Navidad siempre es una época en la que hacemos la vista gorda y nos dejamos llevar por la tentación. Son fechas en las que la comida cobra especial relevancia, ya sea con la familia, amigos o las consabidas comidas de empresa, y es normal cometer algún exceso que otro. Pero una vez que han pasado, puede que queramos afrontar el año nuevo con un plan de choque para perder esos posibles kilos que hayamos ganado.
No pasa nada por haber tenido un par de semanas de comilonas, lo importante es no hacer de eso un hábito. También es importante no dejarse llevar por dietas milagrosas y fantásticas que nos prometen perder todo lo ganado en apenas unos días. No, lo mejor es volver a nuestra rutina de dieta saludable y ejercicio, hacer vida sana y veremos cómo nuestro cuerpo nos lo agradece de forma permanente y nos sentimos mejor.
Los dos pilares en los que tenemos que centrarnos es en la alimentación y el ejercicio:
Después de las fiestas es incluso normal que nuestro propio cuerpo nos pida moderación, después de las semanas de comidas y cenas copiosas. Cuida mucho la hidratación y ten siempre a mano una botella de agua o una taza de té. También es importante que aumentes un poco el consumo de frutas y verduras. Las cremas de verduras son una gran idea para estos días porque, además, se sirven calientes y sirven para entonar el cuerpo.
El pescado es también una gran alternativa para comer más ligero estos días. A la plancha, con una ligera guarnición de patatas, nos ayudará a volver a nuestra rutina de siempre. Nuestra gama Sano Sano con productos reducidos en sal y bajos en grasa, también puede ser la solución perfecta a tu dieta.
En cuanto al ejercicio, no cometas tampoco ningún exceso. Sal a andar, media hora al día puede ser suficiente; sube y baja escaleras y, aparte del paseo, elige ir andando a los sitios si es posible, no cojas el transporte público para únicamente un par de paradas. Si normalmente hacéis ejercicio, como correr o vais al gimnasio, empezad el nuevo año un poco más suave, para ir retomando el ritmo poco a poco.
En definitiva, no intentéis recuperar el tiempo perdido de la noche a la mañana. Tomároslo con calma, comed bien, haced ejercicio y, sobre todo, preparaos para afrontar un nuevo año con energía.