Parece que la Navidad llama cada vez más fuerte a nuestra puerta. El turrón y los villancicos en el supermercado, las bajas temperaturas por las calles y el afán por comprar que se respira en las tiendas, hasta parece que van a desaparecer los productos. Pero en otoño hay que darle a los frutos secos, y no sólo en otoño, sino durante todo el año.

Es normal ver en alguna esquina de las ciudades, el típico puesto de la castañera, con ese olor que desprende a brasas y a madera. Aficiónate a la castaña o a las nueces, que también se consumen bastante en esta época. Nueces, almendras, castañas…cualquier fruto seco, además son perfectos para la memoria.

Ingredientes:

– Un pollo entero
– 2 naranjas y 1 limón
Frutos secos (sobre todo nueces)
– Sal, vino blanco y aceite

Preparación:

Pongamos en una bandeja el pollo, con piel y todo que después esa parte cuando esté tostada es una maravilla comerla. Añadimos las naranjas a la mitad y el limón dentro del pollo. Los frutos secos (o crudos) los podemos añadir antes o durante el horneado. Ponemos el horno a 200 grados mientras se calienta y después metemos el pollo. Una vez dentro, lo rociamos con vino y zumo de naranja justamente a mitad de horneado. Ahí es cuando podemos añadir también los frutos secos para que no se nos quemen. Tras 40 minutos en el horno (lo podemos ir controlando), sacar y disfrutar, ¡ay esa piel crujiente!

Si eres judío (o si no te gusta el pollo), el cuarto jueves de noviembre se celebra ThanksGivingDay por lo que el pollo se puede sustituir por pavo, ¡qué polifacéticos somos en Tello!

Cada vez hace más frío, no sé si lo habéis notado, pero ni el veranillo de San Miguel va a solucionar esto.
Por lo tanto he tomado la decisión de proponeros una RECETA en la que el horno es el protagonista. Bueno, el horno y la pieza de carne de Tello. Lo haremos para que disfrutes siempre con control y pensando en que después nos tocará quemarlo haciendo deporte, así que no conviene abusar.

Saca la libreta de recetas que nos ponemos con ello.

Ingredientes:

Pieza de carne de Tello
– Zanahorias
– Coliflor
– Especias
– Vino blanco
– Aceite y sal

Preparación:

Tenemos que coger la pieza de carne y recubrirla bien con especias como romero y tomillo. De esta manera no abusaremos de la sal y lo haremos mucho más saludable. Por ejemplo, los hipertensos lo podrán consumir sin problema. En una fuente colocamos la pieza de carne, pelamos las zanahorias y las cortamos, la coliflor la partimos también en trocitos, un chorrito de vino blanco y una lámina de aceite, tampoco es plan de ahogar a la pobre carne en grasa, además mucha grasa ya la suelta la propia pieza. Lo metemos al horno y tras una hora y media a 180 grados, lo tendremos listo para degustar. Un truco, a los 45 minutos le metemos chorrito de vino y medio baso de agua, que quedará mejor.

Ahora sólo queda invitar a amigos, que esto solo no se puede (debe) comer.

No sé a vosotros, pero lo de picotear es una cosa que a mí me encanta. Está claro que hay que hacerlo de una forma controlada, pero es cómodo, rápido y como dice mi madre “se ensucia muy poco”, por lo que la receta de esta vez no puede ser más sencilla.

Una amplia variedad de quesos, desde el más tierno y desde el punto de vista nutricional el menos graso, hasta uno de oveja, pasando por un Semicurado de Peñavieja.

Saca la tabla de cortar, un buen cuchillo de queso, unos platos pequeños y que fluya la conversación con tus amigos o tu familia, porque este tipo de cenas son perfectas para hablar, hablar y hablar hasta acabar lo que tenemos en la mesa. Un consejo, ¡vete enfriando un vino blanco!

Ingredientes:

– Queso Tierno Peñavieja
– Queso Oveja Curalmayor
– Queso Semicurado Peñavieja
– Nueces, almendras
– Picos de pan

Preparación:

Muy sencillo, coger una cuña de cada queso (según comensales) e ir partiéndolo. Que la gente coja y lo acompañe de frutos secos o picos de pan, según gustos. Un consejo, el de oveja comerlo la primera vez solo, para que podamos percibir todo el sabor que tiene.

Conveniente solo llevar una cuña, ya iremos a por más, o nos arriesgamos a quedarnos sin queso en los primeros 15 minutos.

Parece que estamos perdiendo las buenas costumbres. Hace un par de décadas lo que se repartía en los recreos era un buen bocadillo. Jamón, lomo, queso…cualquier opción era buena, pero parece ser que las cosas han cambiado y la bollería industrial y las gominolas nos invaden, y esto no me gusta tanto, y menos a diario.

El bocadillo es algo de toda la vida y algo que tiene que continuar entre nosotros. Tenemos que educar a nuestros niños en este formato de comida para la media mañana o la media tarde. Un buen bocadillo es algo placentero, y un buen bocadillo de lomo a la plancha con queso, mucho mejor.
Es sencillo, rápido y nos puede sacar de más de un apuro, ¿de cuantos apuros nos ha sacado en las excursiones del colegio?. Tan sencillo como tener cinta de lomo en casa, un buen queso y pan.

Ingredientes:

– 3 filetes de lomo por persona
– 4 lonchas de queso
– Pan integral (vamos a darle el toque nutricional a esta receta)

Preparación:

Freímos los filetes con un poco de aceite (para que no se nos peguen). Vuelta y vuelta al lomo. El jugo que sueltan los filetes nos vendrá bien a la hora de hacer más jugoso el bocadillo. Abrimos el pan, colocamos el queso y encima los filetes, de esta manera el queso se derretirá y quedará mucho mejor. La tapa de pan que quede suelta la mojamos un poco con el jugo del filete de la sartén. Esto es lo menos formal pero lo que a todo el mundo gusta.

Sólo queda disfrutar.
Y lo mejor de todo que te lo puedes llevar donde quieras. Comer en casa, en la calle o sentado en una piedra en el campo, pero ¡cuidado que se enfría!

Siempre que viajamos o desayunamos en hoteles vemos el famoso desayuno continental, inglés, americano o como le quieran llamar. El caso es que no faltan nunca el Bacon y los huevos revueltos.

Desde Tello te acercamos una receta fácil y rápida de preparar con uno de nuestros productos estrella, el “Bacon”. Puedes utilizar cualquiera de nuestras variedades como por ejemplo el ahumado natural.

Ingredientes:

– 250 gramos de Bacon Tello.
– 4 huevos.
– Sal y aceite.

Preparación:

Cortamos el Bacon en finas lonchas, posteriormente lo pasamos por la sartén para freírlo a gusto de cada uno, bien sea más o menos hecho. Paralelamente batimos los huevos en un bol y los pasamos por la sartén para su cocción, añadiendo una pizca de sal y aceite.

Finalmente este desayuno lo podemos acompañar lógicamente con tostadas y un café para así completar un apetitoso y enérgico desayuno.